viernes, 9 de octubre de 2015



BLOQUEOS

La conciencia se esparce
y se dispersa
como el contenido de una botella de agua al derramarse.

Y lo escuchado
se agazapa en un rincón.
Y sigue la jornada
y la actividad
y el mundo en su conjunto
y atrás queda,
de lado,
ese puñado de palabras
de vital importancia
que han caído al abismo del espíritu.

Y al fin,
al acabar el día
e imponerse el silencio y la quietud
la máquina se activa
y surge, neblinoso,
el momento archivado.

Pero no las lágrimas.

El pesar tan sólo.

Vidas
sin posibilidad de ser rebobinadas
que se van escurriendo
lenta y dolorosamente…
Anuncios emitidos hace tiempo,
eventos programados que el destino
aplaza o acelera
según le da el siroco.

Y vacíos inmensos en los cuales
rebotan las preguntas
y se pierden las quejas,
ya baldías,
y resuenan plegarias en murmullos
casi siempre inaudibles.

Y esa gris sensación de estar tan vivo
que acompaña
la marcha hacia adelante
de los supervivientes.

#SafeCreative Mina Cb

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